(Publicado en Diario Puntal el 22 de abril de 2016)
En el día de hoy el diario Puntal de Río Cuarto publicó la respuesta del legislador Oscar F. González a una nota publicada el día anterior en donde se reproducían algunos de mis dichos sobre la penosa reforma electoral que la Legislatura de Córdoba (que dicho legislador preside) aprobara el 21 de diciembre próximo pasado. Esto es lo que tengo para decirle al respecto.
Hubiera deseado enfocarme en la discusión por la reforma electoral, pero lamentablemente debo empezar respondiendo a la argumentación ad hominem realizada por el legislador González.
Comienza González aludiendo a mi persona como «intitulado ‘experto en sistemas electorales'». Aclarándole al legislador que «experto» no es un título sino un adjetivo que refiere a los conocimientos y la experiencia de alguien respecto de una materia, le digo que jamás me presento como experto en sistemas electorales, por la simple razón de que no creo serlo. Tal denominación, a mi entender exagerada, me fue asignada por el periodista que me entrevistó telefónicamente, quizás al ver mis antecedentes como autor de múltiples artículos a lo largo de 10 años y como expositor sobre la materia en las dos cámaras del Congreso de la Nación. Agradezco al legislador el tiempo dedicado a «googlear» mis datos personales, pero debo aclararle que no poseer ningún título en la materia no invalida la veracidad de mis afirmaciones. Creerlo así constituye un error lógico tan grosero como si yo descartara sus opiniones en materia electoral por no ser González abogado sino médico cirujano.
Luego del infructuoso intento del legislador de desacreditarme, continúa con un repaso de las actividades de la Comisión Especial de Reforma Política creada en la Legislatura de Córdoba. Cita entonces el listado de oradores que se presentaron ante la misma a partir del mes de abril, pero luego afirma que «en ningún caso, como lo afirma falsamente Smaldone, hubo conclusión alguna de los legisladores en el sentido de que ‘no se aconsejaba implementar este sistema en la provincia'». Lo que omite González son las declaraciones públicas del legislador Carlos Gutiérrez, presidente del bloque oficialista, realizadas el día siguiente de finalizadas las exposiciones de los expertos. Según el diario La Voz del Interior del 17 de junio de 2016, Gutiérrez decía: «Nos vamos a quedar con la boleta única que tenemos hoy. Córdoba ha avanzado y creemos que tenemos una buena herramienta que ya ha dado muestras de que es eficiente y práctica para la gente. Sí buscaremos, a través de algún mecanismo digital, la manera de acelerar los tiempos para tener resultados confiables en mejores tiempos». Efectivamente, anunciaba que en Córdoba se mantendría el sistema de boleta única de sufragio.
No fue hasta el 26 de noviembre de 2016 —casualmente, un par de días después de que se desistiera de usar la «boleta única electrónica» a nivel nacional para las elecciones de 2017— que el propio legislador González anunciaba que desde el oficialismo se impulsaría este método de voto electrónico para la Provincia de Córdoba. En declaraciones al diario Puntal del 27 de noviembre afirmó: «Habiendo fracasado las gestiones a nivel nacional, en Córdoba vamos a avanzar de inmediato en la sanción de una ley para implementar la Boleta Única Electrónica. Es una decisión tomada». ¿Por qué habría sido noticia, si como dice en su respuesta la inciativa había sido enviada al resto de los partidos 3 meses antes?
La realidad es que el proyecto de reforma electoral apareció a fines de noviembre de 2016. Y fue tratado y aprobado velozmente en sesiones extraordinarias de la Legislatura, algo muy llamativo considerando que no hay elecciones provinciales hasta el año 2019. Y finalmente se aprobó desoyendo a la gran mayoría de los expertos en derecho electoral y sistemas informáticos que el legislador González cita en su respuesta. Entre ellos los doctores Daniel Penazzi y Daniel Zovatto, que también expusieron sus críticas en el Congreso de la Nación. Es más, en un intento desesperado por frenar la lamentable reforma, se organizó una conferencia de prensa en la Facultad de Matemática, Astronomía, Física y Computación de la Universidad Nacional de Córdoba, con la participación de reconocidos especialistas un día antes del tratamiento en el recinto de la Legislatura. No sirvió de nada, como tampoco el documento elaborado por los Departamentos de Computación de 5 de las principales universidades nacionales con carreras de informáticas (entre ellas, 2 de Córdoba) y varios institutos de investigación del CONICET diciendo «NO al Voto Electrónico».
Efectivamente, como dice el legislador González, la reforma electoral fue tratada por la Comisión Especial de Reforma Política antes de mitad del 2016. Pero sólo para producir un proyecto contrario a las recomendaciones de los expertos —y a las declaraciones públicas del bloque oficialista—, casi sobre el fin del año, y aprobarlo sin mayor trámite el 21 de diciembre a las 21 horas. Y como dijo el poeta Antonio Machado: «la verdad es la verdad, dígala Agamenón o su porquero».
Impecable.